El ilíaco, junto con el psoas, forma el grupo de músculos iliopsoas, que es responsable de flexionar la articulación de la cadera y facilitar el movimiento suave de la cadera. Al involucrar efectivamente el ilíaco, los ciclistas pueden lograr un mejor control y estabilidad durante su viaje, lo que en última instancia mejora la experiencia general de conducción.
Comprender la función del ilíaco e incorporar ejercicios específicos para fortalecerlo puede mejorar significativamente el rendimiento y la comodidad del ciclista. Un músculo ilíaco bien acondicionado asegura un movimiento más eficiente de la cadera y apoya la capacidad del jinete para adaptarse al movimiento del caballo, creando una asociación unificada entre el caballo y el jinete.